Horcas volvió a tocar en CABA. Horcas volvió a ser una fiesta. Como cada presentación. La excusa esta vez fue el 20º aniversario del álbum homónimo. En la previa, mucho frío, pero una vez dentro de El Teatro el calor reinaba. Reinó la tempestad en una noche especial con muchas sorpresas.
Con un buen marco de público comenzó el aguante con los Arraigo quienes hicieron un set efectivo con buena aceptación por parte del público.
En el sector de la barra exterior, hubo stands diversos: para tatuarse en vivo, de la cerveza con la marca de la banda, de merch, del vinilo de álbum que sería homenajeado en la velada y también de la gente de Arraigo.
Y arrancó la fiesta con un Walter Meza exultante contagiando a todos arriba y abajo del escenario. Horcas es una de esas bandas que nunca se conforma, siempre va por más y logra su cometido: el Topo Yañez en dupla con un demoledor Cristian Romero haciéndoles la segunda a Lucas Bravo y Sebastián Coria quienes destilaban ritmo y solidez con la dupla de guitarras, tal vez, más potentes del metal argentino.
Hubo de todo, pero de todo se verdad: subió Gabriel Lis – uno de los violeros del álbum homenajeado -, los infaltables loquillos de Kapanga – el Mono, Maikel y Mafia -, Corvata de Arde la Sangre, Corcho Rodríguez, las talentosas y bellas Brenda Cuesta de Bloodparade y la tanguera Eli Maric – con interesante registro para el rock y el metal -, Javier «Knario» Compiano de Plan 4 – emotivo reconocimiento y agradecimiento al fallecido baterista Gonzalo Espejo -, y Richard de Ásspera.
En una noche en la que predominaron los temas de «Horcas 2002» destacamos «Junto a vos», «Sueños», «Psicosis», «Amargo sabor», «Esperanza», «Punto final», «Argentina tus hijos» y el cierre, obviamente, con «Destrucción».
En las redes se leen agradecimientos de todo tipo… Estar ahí fue algo muy especial, gracias por tanto, Horcas… Horcas Orgullo Nacional… Prendieron fuego el estadio Flores… Insuperable show, gracias por existir…
Reinó la tempestad.
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